Pérdida auditiva en niños por Ototoxicidad de medicamentos




“Mi primera reacción cuando descubrí que mi hija no escuchaba del oído izquierdo fue de enojo, los medicamentos a los que estuvo expuesta desde bebé pudieron hacer merma en su audición después de ocho años, por ser ototóxicos”, así describe Patricia Bahena su experiencia al descubrir accidentalmente, durante el confinamiento por la pandemia, la pérdida auditiva de Alondra.

Y añade: “cuando mi hija era pequeña se enfermaba mucho, le mandaban muchos medicamentos y antibióticos por largo tiempo; según me han dicho los médicos, estos pudieron dañar su oído por la ototoxicidad de las medicinas, recetadas sin tomar en cuenta que a la larga pudieran afectar el oído, y peor aún, sin que los papás nos demos cuenta. Alondra nunca tuvo problemas de lenguaje ni del habla que pudieran darnos señales de alerta, nunca se hizo visible un problema de audición”.

En opinión de la Dra. Martha Vidal, médico especialista en Audiología, Foniatría y Otoneurología, no se sabe a ciencia cierta el por qué ciertos medicamentos afectan el oído -se cree que puede ser por el daño a las células ciliadas o vasos sanguíneos dentro del oído interno-, y destaca la importancia de que los médicos adviertan a sus pacientes sobre los riesgos que conllevan ciertos tipos de medicamentos que prescriben, el efecto que puede causar el mezclar uno con otro (en caso de ser así), además de las consecuencias que puede haber al tomar dosis más altas que las recetadas y/o ingerirlos por periodos largos de tiempo.

“Los síntomas de ototoxicidad pueden presentarse repentinamente o aparecer con el tiempo. En el caso de los niños afectados por ototoxicidad, éstos podrían presentar síntomas como pérdida mínima de la audición, pero sin notar un problema, zumbido en los oídos (tinnitus), problemas graves con el equilibrio, problemas de audición, generalmente en ambos oídos (pérdida de la audición bilateral), problemas para escuchar ciertas cosas, desde sonidos agudos hasta voces cuando hay ruido de fondo, y profunda pérdida de la audición (sordera)”, explica la especialista.

“El oído se divide en tres partes: oído externo, oído medio y oído interno, siendo este último atacado por los compuestos ototóxicos de forma muy específica. Concretamente, la cóclea contiene los receptores sensitivos para la audición y el aparato vestibular es el responsable del equilibrio. Es importante mencionar que a la fecha no existe un tratamiento para la ototoxicidad por medicamentos, pero es causa de pérdida auditiva”, destaca la Dra. Martha Vidal.

Es importante mencionar que los problemas causados por la ototoxicidad no siempre son fáciles de detectar, hay niños con una pérdida mínima de audición que pueden tener síntomas que no parezcan tan importantes como para informar a los padres o al médico, porque algunos de ellos no notan nada. Por eso es importante que antes de que un niño tome un nuevo medicamento, se consulte al médico sobre qué efectos secundarios podría causar y a qué debe estar atento.

Por Starkey DevOps

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